Confirman nuevos proyectos para producir hidrógeno verde en Argentina

YPF adelantó que se encuentran en estudio dos proyectos para avanzar con el desarrollo de la energía renovable en el país. Se prevé la construcción de una central solar y eólica, para promover un cambio en el sistema energético.

Las empresas energéticas apuestan cada vez más al cambio en el sistema eléctrico tradicional. Tal es el caso de YPF, que recientemente confirmó que se encuentra en análisis la implementación de dos proyectos renovables para producir hidrógeno verde en Argentina. 

La compañía semi estatal argentina reveló que se está evaluando el desarrollo de un parque eólico y solar, tanto a pequeña como a gran escala. Además, YPF Luz está cerca de alcanzar los 1000 MW de energía renovable instalada en el país, lo que deja en claro el compromiso por la transición energética.

Lo cierto es que las autoridades trabajan para promover el crecimiento de las energías renovables e hidrógeno. En este caso, están evaluando una amplia gama de proyectos de hidrógeno verde, que abarcan desde iniciativas a pequeña escala hasta grandes plantas, ya sea a través de su gerencia de Nuevas Energías o por medio de YPF Luz.

¿Qué está haciendo Argentina por las energías renovables?

El equipo de Innovación y Tecnología de YPF Luz informó que están evaluando dos proyectos de hidrógeno verde, uno de menor escala y otro de gran impacto. Este último se desarrollará por fases, considerando aspectos como el terreno necesario para la instalación de parques eólicos de gran tamaño. 

Se espera que el año que viene se empiecen a instalar nueve turbinas de 7 MW cada una en el Parque Eólico CASA, un proyecto de 63 MW que tomará alrededor de dos años en su ingeniería y construcción. Su implementación aportará la electricidad necesaria para abastecer su consumo.

En el caso del hidrógeno verde, la escala sería mayor, y si se mantiene la tecnología de aerogeneradores de 7 MW empleada en la central de la ciudad de Olavarría, el parque dedicado a esta producción podría contar con unas 140 turbinas. En este caso, se aportaría un total de 980 MW de potencia, aunque con requerimientos adicionales en términos de equipamiento y tiempo de construcción.

En la actualidad, YPF Luz cuenta con 497 MW de energía renovable en operación y otros 418 MW en construcción, distribuidos en varias provincias del país. También participa activamente en el Mercado a Término (MATER) para adjudicar más capacidad de despacho.

Para competir en la producción a gran escala de hidrógeno, será necesario reducir tiempos y costos. En esta línea, factores como un 80% de carga en algunos parques eólicos podrían aumentar el tiempo de operación de los electrolizadores, ofreciendo una ventaja competitiva. 

Los expertos en el sector indican que este aspecto está estrechamente ligado al financiamiento, lo que podría hacer viable el proyecto. Este punto resulta importante en la planificación a largo plazo, ya que garantiza la sostenibilidad del proyecto y el inicio de las operaciones. 

En cuanto a la producción de amoníaco a pequeña escala, la empresa local está trabajando en un proyecto en el Puerto de Bahía Blanca, con una capacidad estimada de 30.000 a 40.000 toneladas al año. En este caso, se establecieron conversaciones con potenciales compradores, lo que permitiría implementar el proyecto en un plazo más corto y adquirir experiencia para futuros desarrollos a gran escala.

Finalmente, desde YPF mencionaron que la clave para estos proyectos está en el almacenamiento de energía, por lo que planean avanzar en estudios geológicos para mitigar riesgos y aumentar la factibilidad. Según sus proyecciones, a partir de 2030 podría comenzar el desarrollo de proyectos de hidrógeno verde y azul a gran escala, siempre que la demanda lo permita.

¿Qué es el hidrógeno verde y para qué sirve?

Los especialistas aseguran que el uso del hidrógeno como combustible creció durante los últimos años, dados sus beneficios para el medio ambiente y la economía. De hecho, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) indica que su demanda global se triplicó desde 1975. 

Para 2030, se espera alcanzar una producción de 30 millones de toneladas de hidrógeno verde. Esta fuente de energía limpia solo genera vapor de agua como residuo, sin contaminar el aire. Esto lo hace altamente superior en comparación con los combustibles fósiles, como el carbón y el petróleo.

Hoy en día, la industria se encuentra en pleno crecimiento, con un destaque principal en autos y naves espaciales. Con el desafío de descarbonizar la economía, el hidrógeno está llamado a desempeñar un papel crucial. 

Si los costos de producción se reducen en un 50% para los próximos seis años, tal como prevé el Consejo Mundial del Hidrógeno, este gas se consolidará como uno de los combustibles más prometedores para el futuro.

Respecto a su funcionamiento, este se obtiene a partir de un proceso que utiliza energía de fuentes renovables, como la eólica o la solar, para descomponer el agua en oxígeno e hidrógeno mediante electrodos. Al canalizarse hacia una pila de combustible, se combina nuevamente con oxígeno del aire y se genera electricidad. 

Argentina, y en particular la provincia de Río Negro, cuenta con condiciones naturales excepcionales para posicionarse como un actor clave en la economía del hidrógeno verde a nivel local, nacional e internacional.

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