La oportunidad de Argentina para liderar el mercado de las energías renovables: ¿de qué trata y por qué es única en el mundo?

Ante el desarrollo de las energías renovables, el territorio argentino se enfrenta a una oportunidad única de éxito. Se espera que el país acelere el ritmo de crecimiento para alcanzar el objetivo de cero emisiones para 2050.

Según indican los expertos en el sector, Argentina tiene el potencial para liderar la transición energética sin perder el foco de mitigar los efectos del cambio climático y proteger al medio ambiente. En esta línea, se destacan los recursos nacionales para impulsar dicha transformación.

El país cuenta con extensas áreas de territorio donde se despliegan proyectos de producción de minerales, por ejemplo, lo cual se presenta como un componente clave para muchas de las tecnologías de energía limpia.

Algunos de ellos son el litio, el cobre y la plata. Respecto a este último, el territorio argentino se encuentra dentro de los diez mayores productores, aunque con una participación aún baja.

En términos regionales, América Latina tiene más de un tercio de las reservas de cobre y plata a nivel global. Desde el Banco Interamericano de Desarrollo aseguran que esto la posiciona como un lugar de mucho poder de influencia.

A este escenario, se le agrega que Argentina aporta un gran porcentaje significante de las energías renovables que se observan en la región. Se registra energía hidroeléctrica, de la mano de Brasil, Venezuela, México, Colombia y Paraguay. 

Por su parte, hay recursos solares y eólicos por parte de Brasil, México y Chile. Estos ganan cada vez más terreno en términos de energías limpias, dados sus aportes y beneficios para el ecosistema.

En Argentina, el gas natural suministra el 50% de la electricidad. Sin embargo, se espera que la energía eólica y la energía solar fotovoltaica cubran la mayor parte del aumento de la demanda para 2050, particularmente por el potencial que ofrece la Patagonia. 

Sin embargo, el petróleo sigue siendo la fuente principal del transporte, representando casi el 80% del consumo energético. Lo cierto es que tanto en Argentina como en América Latina cuentan con una sustancial brecha en la implementación de políticas necesarias, según la Agencia Internacional de la Energía (IEA).

Cabe destacar que, si bien más de la mitad de los países regionales se comprometieron a alcanzar emisiones netas cero para mediados de siglo, no se dispone de las medidas gubernamentales necesarias para lograrlo.

Se espera que la región continúe dependiendo en gran medida de los combustibles fósiles para satisfacer las necesidades energéticas, especialmente considerando que América Latina y el Caribe poseen aproximadamente el 15% de los recursos mundiales de petróleo y gas natural.

Al mismo tiempo, se anticipa que los avances en la transición hacia energías limpias serán limitados. En tanto, uno de los principales obstáculos es la falta de inversión económica. 

Los expertos afirman que para cumplir con los objetivos, la financiación de proyectos de energía limpia debería duplicarse de aquí a 2030, alcanzando los USD 150.000 millones, y multiplicarse por cinco para 2050.

¿Cuál es la postura de América Latina ante la transición energética?

En el último año, la región latinoamericana logró que el 64% de su electricidad se sustentara de energías renovables, una cifra que duplica el promedio global y la posiciona como líder mundial. 

Dicho avance se debe en gran parte al desarrollo en Argentina, pero también en Brasil, México y Chile. Sin embargo, este progreso podría verse amenazado en los próximos años si no se adoptan planes de expansión ni cambios significativos.

El informe de Perspectivas Energéticas de América Latina de la Agencia Internacional de la Energía (IEA) demuestra que, en caso de tomar acciones concretas, no será posible alcanzar el objetivo de cero emisiones netas para 2050.

Este no es más que un gran desafío en cuanto a la dependencia de los combustibles fósiles, que se usan en mayor medida en el transporte marítimo, aéreo, terrestre y en la industria en general.

Solo si los países de la región se comprometen a cumplir con sus metas, las energías renovables podrían cubrir la nueva demanda. Además, esto permitiría aumentar las exportaciones de petróleo en casi dos millones de barriles diarios, diversificando la oferta global y aumentando los ingresos. 

Asimismo, el uso de recursos renovables competitivos impulsaría la producción de hidrógeno de bajo costo y bajas emisiones, ayudando a descarbonizar la industria pesada y el transporte de carga. 

La IEA prevé también un aumento en la producción de biocombustibles y un incremento en los ingresos a largo plazo por minerales críticos, superando los ingresos actuales por combustibles fósiles.

En síntesis, cada uno de los países de la región debe adaptarse a las nuevas exigencias del mercado, sin descuidar el medio ambiente. Esta será la única manera de adaptarse hacia un futuro sostenible y próspero para las futuras generaciones.

More From Author

Crece la relación bilateral entre Argentina y Chile para avanzar con la energía renovable

La provincia de La Rioja afianzó su relación con el territorio chileno, con el fin…

Confirmado: Brasil será la sede de la Cumbre Mundial de Transición Energética en 2024

El país vecino será sede del evento más importante en materia de energías renovables. Se…

Así son las herramientas legislativas que promoverán las energías renovables en Argentina

El Ministerio de Energía y Minería analizó junto con la Comisión de Energía y Combustibles…