La Comisión Europea aseguró que hubo un récord en lo que va de 2024, al registrarse que más de la mitad de la electricidad proviene de fuentes renovables. Se trata de un avance significativo, teniendo en cuenta la tradicional adopción de los combustibles fósiles.
La Comisión Europea (CE) confirmó a través de un informe que el territorio avanzó en materia de sustentabilidad, al registrar que más del 50% de su sistema eléctrico proviene de fuentes renovables. Esto demuestra su compromiso por proteger el medio ambiente y contrarrestar los efectos de los combustibles fósiles.
En detalle, las fuentes de energía renovable generaron más de la mitad de la electricidad en la Unión Europea (UE). Estos datos corresponden al primer semestre de 2024, por lo que se espera que el crecimiento siga consolidándose en los próximos meses.
El rápido aumento en la generación de energía renovable está desafiando profundamente al sistema eléctrico europeo, que en el pasado dependía en gran medida de las importaciones de combustibles fósiles, como el gas y el petróleo, así como de la energía nuclear, cuyo uranio también proviene mayoritariamente del extranjero.
¿Cuáles fueron los avances que tuvo la Unión Europea sobre las energías renovables?
Por primera vez en la historia, durante el primer semestre de 2024, más de la mitad de la electricidad demandada por los 450 millones de habitantes de la UE fue generada por fuentes limpias y autóctonas. En tanto, el año pasado se instaló más potencia solar fotovoltaica que nunca antes en un año.
Este logro fue posible, en gran parte, por el impresionante crecimiento de los parques eólicos y solares en la región. Para ponerlo en perspectiva, solo en 2023, la UE instaló 56 gigavatios de energía solar fotovoltaica, superando incluso la capacidad nuclear actual de Francia, que cuenta con 43 gigavatios y es la segunda mayor potencia nuclear del mundo, después de Estados Unidos.
El sector eólico también experimentó un crecimiento significativo, con 16 gigavatios instalados el año pasado, elevando la capacidad total de energía eólica a 221 gigavatios a finales del año, de los cuales 201 están en tierra firme y 19 en el mar.
Con un parque eólico y solar cada vez más robusto, el territorio logró obtener más del 50% de electricidad proveniente de fuentes renovables. Además, mantuvo un suministro energético confiable, a pesar de haber reducido su consumo de gas entre agosto de 2022 y mayo de 2024.
Dicho escenario significó una disminución del 18% en el uso total de gas en comparación con 2021, con una drástica reducción en las importaciones desde Rusia, que pasaron del 45% del total de gas importado en 2021 al 18% en junio de 2024.
A pesar de esta disminución en el uso de gas ruso, otros países como USA y Noruega aprovecharon la oportunidad para aumentar sus ventas de gas a la UE. Además, la Comisión Europea señaló un aumento en la capacidad de importación de Gas Natural Licuado (GNL), con la construcción de 12 nuevas terminales y seis proyectos de ampliación entre 2022 y 2024.
El suministro de gas para los próximos meses parece garantizado, ya que la UE alcanzó su objetivo del 90% de almacenamiento para el invierno el 19 de agosto de 2024. Cabe destacar que el logro se desarrolló antes del plazo del 1 de noviembre.
Otro dato relevante es que las emisiones de gases de efecto invernadero en la UE disminuyeron un 32.5% entre 1990 y 2022, mientras que su economía creció aproximadamente un 67% en el mismo período, según el Informe sobre el estado de la Unión de la Energía 2024.
¿Qué avances hubo en la Unión Europea sobre las energías renovables?
La Unión Europea lleva adelante un fuerte compromiso con el medio ambiente, por lo que desarrolla el sistema energético renovable. Esto quedó demostrado en 2023, cuando la energía eólica superó al gas y se convirtió en la segunda mayor fuente de electricidad, solo por detrás de la energía nuclear.
Durante el primer semestre de 2024, las energías renovables, como la solar, eólica, hidráulica y biomasa, generaron más del 50% de la electricidad en la UE. De hecho,
en 2022, el consumo de energía primaria mantuvo su tendencia a la baja, registrando una disminución del 4,1%.
Pese a estos avances, la Comisión Europea advierte que será necesario intensificar los esfuerzos en eficiencia energética para lograr la meta de reducir el consumo de energía final en un 11,7% para 2030.
A su vez, resulta importante avanzar en la electrificación de los sistemas de calefacción y en la renovación de los edificios, ya que en muchas regiones la calefacción sigue dependiendo del gas y la eficiencia energética de las infraestructuras actuales es insuficiente.
El informe también señala que es prioritario abordar los altos precios de la energía, un factor clave para mejorar la competitividad de la industria europea y acelerar la inversión en redes de infraestructura integradas, esenciales para la electrificación de la economía.